Entre los 25 a 50 centavos de dólar, son los incrementos que se registró en los precios de la libra del queso a partir de noviembre y diciembre de 2022 en los mercados de Santa Rosa de Lima y La Unión, confirmaron los comerciantes.
De acuerdo con los vendedores de la plaza La Quesera ubicada en la ciudad de Santa Rosa de Lima, en el año se dan hasta tres veces el alza de los precios en los productos lácteos durante el verano debido a que así aumentan los costos de las harinas u otros tipos de alimentos para sostener los hatos ganaderos.
En noviembre los precios eran de $4.25 a $4.50 libra de queso duro blando; el seco de $4.75 a $5.00; a partir del 1 de diciembre el duro blando hoy se compra entre $4.50 a $4.75 y el queso seco de $5.50 a $5.75, son precios confirmados en la plaza de lácteos de la localidad.
Durante los meses del invierno el queso osciló entre los $2.75 a $3 la libra del duro blando y $4, el queso seco.
La Quesera es un sitio donde las personas llegan a comercializar todos los lácteos que se producen en los municipios del norte del departamento, y también de los que ingresan de Honduras y Nicaragua.
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Hay pequeños productos que llegan con dos a tres marquetas de queso que ellos mismos produjeron, otros se dedican a la compra al mayoreo para la reventa.
Las medidas que toman los consumidores ante el incremento del producto es comprar en menos cantidades, es decir que una persona antes compraba cuatro libras de queso, hoy se lleva de dos hasta media libra.
Carlos Alfredo Herrera, comerciante, explica que durante el año las variaciones en los precios se dan hasta tres veces el aumento, es una situación que ellos como vendedores no pueden resolver porque así de caro están comprando a sus proveedores.
“Cuando se termina el invierno empieza a incrementarse el precio; porque es difícil que los ganaderos le bajen los costos porque ellos están siendo afectados por todos los gastos que tienen para mantener el mantenimiento de sus ganados”, agregó Herrera.
Luisa Majano, antes compraba dos libras de queso para consumir en su hogar, dice que han tenido que reducir el consumo porque el queso sigue en incremento, “hoy me compro media libra de queso duro blando y otra media del seco porque el bolsillo no nos alcanza para comprar más”.
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Otros vendedores indicaron que en otros mercados el queso se encuentra más caro por los costos de traslados del producto.
Algunos ganaderos consultados, quienes, por temor a represalias, manifestaron que el verano es una situación casi insostenible para sus reses, porque todos los productos desde los concentrados vitaminas y otros gastos se incrementan, ese efecto se viene a reflejar en el precio de los derivados del lácteo.
Entre los $26 a $27 son los precios de un quintal de concentrado en los agro servicios. Con uno alimentan a 10 reses en un día. Eso implica que un ganadero gasta hasta un promedio de $780 a $810 mensuales en la compra de comida para los establos.
En el invierno la existencia del pasto en los potreros es una gran ayuda debido a que con eso se mantiene la alimentación del ganado, se evitan hacer gastos en la compra de las harinas.