El pastor evangélico Pedro Andrade dice que en sus 22 años de servicio tiene la satisfacción de haber evitado varios suicidios de miembros de la corporación policial, entre los rangos de subcomisionados, agentes y sargentos.
“Todos somos vulnerables al suicidio, pero en la Policía es más por la presión, primero sus problemas y luego los de afuera; las atenciones en salud mental son permanente en ellos, si están sucediendo suicidios es por servicio o descuido de los elementos que no reciben las charlas, a ellos no se les obliga es por voluntad”, agregó Andrade, quien es uno de los consejeros dentro de la corporación policial y miembro de la Asociación de Capellanes Cristianos de El Salvador.
En el país hay 23 personas que pertenecen a la asociación y están graduadas con el rango de capellán; la mayoría son consejeros espirituales en los diferentes puestos y delegaciones de la Policía Nacional Civil (PNC).
Andrade, quien es líder de una congregación evangélica de unas 400 personas en Santa Rosa de Lima, manifiesta que ellos tienen un programa psíquico social, donde tienen que estudiar el comportamiento, la conducta y el desarrollo saludable en la parte emocional de las personas.
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Según Andrade, se trata de una atención temprana para ayudarles a los niños y a los padres de familia. “Estamos abordando qué es lo que lleva al suicidio a las personas, algunas veces decimos la depresión en la que han caído, pero la causa de esa depresión eso es lo que tenemos que tratar temprano”, manifestó.
En la iglesia cuentan con dos psicólogas que apoyan con charlas.
Además, en el programa Brazos de Amor, que es permanente, han incluido a los niños y menores de edad que están en una situación lamentable porque sus padres murieron o están detenidos en el contexto del régimen de excepción.
“En el programa Brazos de Amor tenemos la atención para unas siete familias que se encuentran en una situación incómoda por el régimen de excepción, que de alguna manera nuestra atención temprana a esos niños de poderles acompañar en el desarrollo para que sean agentes de cambios en el futuro”, agregó.
Salud mental
Orlando Escobar Larios es psicólogo y trabaja en un hospital privado de la ciudad de Santa Rosa de Lima. Para él, la salud mental es la parte medular de toda persona, es el área que se debería de estar más interesada en mantener solvente.
“A veces la persona se interesa porque no le duela un pie, la cabeza, por no tener un estreñimiento, sin embargo la salud mental está relacionada con todo nuestro sistema orgánico y físico”. Una persona con un trastorno depresivo sentirá dolores en su espalda, de cabeza, sensaciones de mareos, deseos de vomitar, baja o aumento en el apetito y su motivación baja en exceso.
Según el experto, está establecido que un 5 % de las muertes a nivel mundial están relacionadas al suicidio.
En los trece años de estar ejerciendo como psicólogo, Escobar Larios manifiesta que ha logrado salvarle la vida a muchos pacientes que tenían el deseo de quitarse la vida, son casos seguidos que se dan cuando se preguntan “¿qué hago, me quito o no la vida?”, diciendo que ya no le encuentran sentido ni sabor a la vida.
No existe un número de sesiones de atención en psicología para un paciente que llega por atención ante el intento de suicidio, todo depende de las características personales de cada individuo y del apoyo en su entorno familiar; pero estos pueden durar 6 meses de atención para que tenga el alta médica, explica el profesional.
Añade que hay pacientes que requieren de la atención del psicólogo y un médico psiquiatra, cuando su tratamiento va acompañado de medicamentos como los antidepresivos o ansiolíticos.
En la clínica donde labora Escobar Larios, atiende a un aproximado de 50 personas al mes, desde menores de tres años hasta adultos mayores de 70 años. En los menores de edad suelen detectar que se comen las uñas y es por ansiedad; en esos casos, trabajan con los padres y el menor.