No hay mundial de fútbol al que alguna estrella de una nación clasificada no pueda asistir debido a lesiones, pero lo de Qatar parece que podría convertirse en récord, quizás, como aseguran los especuladores, por el tema de los tiempos, de comprimir el campeonato doméstico de muchas ligas y obligar a múltiples partidos de manera más seguida y sostenida en el tiempo, algo que antes no ocurría, y que cuando comenzó a suceder, era con muchísima menor incidencia.
Pues bien, a figuras mundiales como Diego Jota (Portugal), N’Golo Kanté (Francia), Georginio Wijnaldum (Países Bajos), Reece Jemes (Inglaterra) podrían sumársele muchas más.
En Argentina, por ejemplo, están en serias dudas Paulo Dybala, Juan Musso y Juan Foyth por sendos problemas físicos.
Richarlison fue descartado para Brasil por algunos medios, pero luego se supo que no es tan grave su lesión. Sin embargo, estará al menos dos semanas de baja antes de volver a los entrenos, y sería de forma gradual, lo que lo podría dejar aún fuera porque llegaría descanchado y no al cien.
Ronald Araujo, defensor uruguayo, está también en serias dudas pues su lesión en el tendón del abductor del muslo derecho es grave, aunque no se sabe con precisión cuánto tiempo le tomaría regresar a las canchas.
El mexicano Raúl Jiménez, quien padece pubalgia, está trabajando de manera específica en Ciudad de México. Ese es un problema que, si no se cuida, puede recaer y de manera más grave. Mientras que Jesús Corona, también azteca, está en proceso de rehabilitación, y difícilmente llegue a tiempo.
En Europa, están tocados el alemán Marcos Reus, el inglés Trent Alexander Arnolt y el español Marcos Llorente.
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