Editoriales Por Rafael Domínguez | 22-03-2025
Interesante que Moisés nunca se constituyó en rey, sino en un delegado de Dios para una misión específica, con poderes limitados y compartido con otros; luego vinieron las leyes que eran el mínimo y el máximo del ejercicio del poder, tanto que el pueblo fue consultado 3 veces sobre el contenido de las leyes y estos dijeron estar de acuerdo en respetarlas, así asumían que ellos tenían también un poder colectivo, además del poder delegado en sus líderes, así nacieron las asambleas o reuniones, donde ese pueblo podía opinar, decidir, limitar o incluso quitar poder a líderes que actuaban mal.